Ante la postura asumida en las últimas semanas por funcionarios estatales y municipales para callar ante cuestionamientos de inseguridad y temas generales de las Administraciones, el Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz, aseguró que el silencio no es la mejor actitud que pueden tomar los funcionarios públicos para resolver la problemática de violencia.
“La violencia ha sido muy difícil en estos días en nuestro entorno, aquí en Irapuato, en Salamanca y en otros lados, nos duele, por eso es nuestra propuesta de seguir construyendo paz (…). Las autoridades en cierto sentido se sienten rebasadas en muchos casos, también nuestro presidente de la República no ha querido hablar y dar datos concretos o no acepta los datos que hay en nuestras realidades, pero no es ocultando los datos o haciéndonos omisos a todos lo que nos cuestionan cómo lo vamos a resolver. Necesitamos atender las realidades que estos datos de violencia, de inseguridad nos están cuestionando y nos cuestionan a todos, a iglesia, a escuelas, a sociedad, a la familia, a gobierno, nos cuestionan a todos y es muy fuerte como lo estamos viviendo aquí en nuestro entorno”, dijo Díaz.
Desde hace mes y medio, algunos funcionarios públicos, como la alcaldesa de Irapuato, Lorena Alfaro García y el gobernador Diego Rodríguez Vallejo, han adoptado una postura de silencio al tratar de abordar temas de inseguridad que afectan a la población.
Al señalar que la recuperación de la paz no es una tarea exclusiva de las instancias de velar por la seguridad de la población, sino de la sociedad en general desde su trinchera, el Obispo de la Diócesis de Irapuato, insistió que la sociedad tampoco puede ser omisa ante los sucesos violentos cada vez más frecuentes.
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