La Fiscalía de Nueva York solicitó al juez Arun Subramanian imponer una condena ejemplar contra el rapero y productor Sean ‘Diddy’ Combs, a quien acusan de mantener “décadas de abuso” hacia sus víctimas.
De acuerdo con los fiscales federales, durante el juicio —que duró siete semanas— se presentaron pruebas suficientes para demostrar un patrón de violencia y explotación. Aunque Combs fue absuelto de los cargos más graves, como tráfico sexual y crimen organizado, en julio pasado fue declarado culpable de transporte para ejercer la prostitución, delito por el cual enfrenta la inminente sentencia.
La cantante Cassie Ventura, ex pareja del artista y testigo clave, envió una carta al tribunal en la que recordó los episodios de violencia física y psicológica que sufrió durante su relación. “Todos los días tengo pesadillas y sigo en tratamiento psicológico para superar mi pasado. Me preocupa que Combs o sus cómplices atenten contra mí o mi familia”, señaló.
Ventura sostuvo que el músico “no tiene interés en cambiar” y lo describió como “el mismo hombre cruel, manipulador y hambriento de poder que siempre ha sido”. A su testimonio se sumaron sus padres, Regina y Rodrick Ventura, así como una ex asistente que declaró bajo el seudónimo de “Mia”, todos ellos insistiendo en que la sentencia refleje la gravedad de los delitos.
Los fiscales advirtieron que, en casos similares donde hubo violencia y control psicológico, las condenas han superado los diez años de prisión, y recalcaron que Combs no ha mostrado arrepentimiento, justificando sus actos como “relaciones tóxicas”.
En contraste, la defensa pidió que la pena no exceda los 14 meses, tiempo que el artista prácticamente ya habría cumplido desde su arresto en septiembre de 2024 en Nueva York.
La resolución será dada a conocer este viernes y se perfila como una de las decisiones más relevantes en torno a la rendición de cuentas dentro de la industria musical estadounidense.
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